Bitácora de Sergio Casado

miércoles, 26 de octubre de 2011

Quería anotar aquí una cita que tomé el otro día, pero al echarme mano en el bolsillo veo que no la llevo encima. Escucho un poco a mi alrededor. Una mujer entra en el bar con un carro de la compra y ofrece moscatel. No la entiendo muy bien. Se dirige a una pareja que está en la mesa de al lado y saca dos bolsas con uvas.
  • Me quedan sólo dos kilos. ¡Gloria bendita! Hala, que te dejo ésta que parece más majica.
  • Yo compro en el mercado.
  • Pues mira, más tonta de comprar en el mercado, porque ésta es especial. ¿Te gusta ésta más doradita? Te la cambio, que ésta está más verducha... Ya verás, a las pruebas me “remeto”. ¡Adiós! …. … ¡El lunes “tol” día!
La mujer que vende uvas se va escopeteada golpeando la puerta con el carro. El resto de clientes sigue cada uno con su matraca particular. De fondo, trajín de periódicos, tazas de café y soniquete de televisión.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario