Bitácora de Sergio Casado

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Anda uno en estos días en perpetua confusión, con los rescates, con el referéndum de Papandreu, con las reuniones de “Merkozy” (denominación acuñada por algún avispado periodista para el tándem de Merkel y Sarkozy). Parece que nadie sabe nada, que esto no hay quien lo arregle y que es un sálvese el que pueda. Esto tiene poco que ver con la Unión Europea de los grandes propósitos, objetivos y solidaridades. La Unión Europea, económica y algunos pronosticaban que política, parece una paella mal hecha. Será que no damos para más. Los que estamos al sur de los Pirineos, mientras tanto, tampoco parece que pintemos mucho. Somos una especie de país fantasma a rebufo de todo, que no sabe o ha olvidado de donde viene y que no importa a donde va, intentando mantener la anestesia de fútbol y otras matracas que siempre funcionan. Es una pura esquizofrenia, un absurdo. Y yo mientras, intentando escribir, al menos, alguna línea con sentido, veraz. Si no sale, hay un par de torres de libros esperando, mucha música, muchas películas, fotografías, mucha curiosidad. La esperanza es aprender algo, mejorar un poco, escapar de la dictadura de la ignorancia, la dictadura de nuestros días, de la que habla Paco Ibañez. Ese es mi palo mayor del barco, aunque no se sepa donde se va. Hay que seguir para adelante. Con todo. Hay un precioso texto de Ricardo Baroja (“Como se graba un aguafuerte”) que leí en estos días, que habla de ese empeño, que ha de ser constante frente a las limitaciones que cada uno tiene. Intentaré tenerlo presente, no olvidarlo, yo que a veces olvido si voy al primer o al tercer piso

...cuando toda mi actividad de aguafortista es quizá nociva, inútil para conseguir expresión artística, entonces es cuando más creo en lo inesperado corregido, en el accidente aprovechado, en la casualidad adaptada, en que aparezca algo genial, algo que esté por encima de lo correcto.”
(de “Como se graba un aguafuerte”, Ricardo Baroja)

*la imagen es "Modistas en el café", de Ricardo Baroja

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